Marrakesh, un destino alucinante (Parte I)

colaboraciones Columnas En Viaje

Viajera incansable, diseñadora y cuentista, Karin Himmel inicia aquí su columna para compartir las maravillosas experiencias que vive casi a diario en sus periplos por el mundo junto a Nicolás

Internacional.- Siempre quise conocer Marruecos y ahora era justo el momento. Estábamos en París, a sólo tres horas en avión. Aterrizamos en Marrakesh casi a las cuatro de la  tarde . Nos encontramos con una ciudad hermosa , de construcciones muy bajas donde sus edificaciones, por decreto, son pintadas de un solo color… rosa envejecido.

Con solo 1,5 millones de habitantes, Marrakesh recibe al año mas de diez millones de turistas. Su aeropuerto es enorme y moderno. Al subirnos al auto que nos esperaba , lo primero que escuchamos fue el sonido de una sirena. Era el recordatorio o llamado a la oración. Uno de los cinco que se hacen al día. Diez minutos después estábamos en el hotel.
Me acuerdo de la cara que puso Nicolás cuando nos revisaron el auto con espejos por debajo y luego nos abrieron la maleta.  Como si esto fuera poco, tuvimos que pasar por un detector de metales ( el mismo que utilizan en los aeropuertos), para poder ir a registrarnos al hotel. Pero la verdad es que esto fue una primera impresión.
Marrakesh es una ciudad muy segura. La cuidan muchísimo, como pudimos apreciar, tanto en las calles  como en las carreteras. Son continuos los controles y la presencia policial está a la vista en cada momento.
El primer día , recorrimos  la ciudad en compañía de nuestro guía Lahcen Aguni, un personaje muy acogedor.
La primera parada fue la “Medina “, ciudad amurallada para su protección y que fue declarada Patrimonio de la Humanidad, por la Unesco. Es realmente para enloquecer. Laberintos, calles angostas impregnadas de colores y olores a especias. Me sentía en una película  mientras me hablaban en árabe  y francés ( lenguas oficiales y obligatorias ).
Lámparas de colores, alfombras  y sedas; artículos elaborados en cuero , madera y plata. Nada tenia precio definido. Si te interesa, preguntas.  La transacción se inicia con un valor, para terminar en uno bastante inferior. Son los reyes del regateo. Para ellos es un arte; a mi, en lo personal, me pone un poco nerviosa. Pero debo reconocer algo. Jamas  me sentí acosada por un comerciante . No me persiguieron ni insistieron ante mi primera negativa.
El día del amor en Marrakesh
Por la tarde, fuimos a un sector rodeado de palmeras. De pronto me vi con un turbante azul y un caftán rojo. A mi lado figuraba Nicolás vestido totalmente de azul, un verdadero beduino. Según su fans club ( encabezado por mi mamá, Patty y Vero), era una mezcla entre  Sir Lawrence de Arabia y Omar Shariff (foto de portada)
Bueno, ahí estábamos nosotros , paseando sobre  Shakira y Madonna, nuestros dromedarios  en el día de los enamorados. Ambos nos reímos mucho y lo disfrutamos plenamente.
El hombre encargado del paseo , nos comentó que la familia de la  presidenta chilena había estado paseando también, hacía poco tiempo. Más tarde en nuestro hotel nos ratificaron esta información.
El segundo día fuimos a Esauira, ciudad turística ubicada en la costa atlántica de Marruecos. Actualmente es un puerto que se dedica a la pesca artesanal. En nuestro camino, nos encontramos con muchos arboles de Argan. Lo más curioso, es que  algunos estaban repletos de cabras instaladas entre la copa , las ramas y tronco del árbol degustando  de sus frutos, cuyo aspecto es muy similar al de las almendras.
Nos detuvimos en una cooperativa (lugar donde trabajan hombres o mujeres con ayuda económica del gobierno) para poder conocer de cerca la elaboración artesanal de este preciado aceite. Seis mujeres estaban a cargo del proceso de elaboración. Naturalmente sucumbimos ante semejante tentación y compramos varios frascos de aceites, cremas y jabones de Argan 100% natural.
Después de aproximadamente dos horas y media  de viaje ,  llegamos a nuestro destino. Allí nos esperaba otro guia del lugar, del cual no recuerdo su nombre, pero si puedo aseverar que, como me comentó mi partner, fisicamente era igual a el personaje “El Fatiga”.
El paseo fue hermoso. Entramos  a la Medina (también declarado patrimonio de la Humanidad por la Unesco) , donde volvimos a encontrar laberintos y calles angostas rodeadas de telas , pinturas y alfombras. La principal producción de este sector es la madera. Imposible olvidar su nombre… se llama Thuya. Es preciosa y tiene un brillo excepcional. Como recibe apoyo del gobierno para su producción ( igual que las artesanas del aceite de Argan) los precios de estos objetos son muy accesibles. Salimos de la Medina con dos dromedarios , una caja mágica, una mano de Fátima y un joyero pequeño de madera.
Antes de partir , quisimos subir a lo más alto de la ciudad y nos encontramos con un fuerte repleto de cañones traídos directamente de Europa .El mar se veía imponente ante nuestros ojos. Esta zona de la ciudad, fue escenario de la tercera temporada de “Game of Thrones”.
En el segundo episodio ,  se podía ver a Khaleesi comprando esclavos.
Continuará….
Karin en el fuerte de los cañones
Karin en el fuerte de los cañones

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